Diabetes tipo 2: ¿Qué Es?
![]() |
Todo Sobre Diabetes Tipo 2 |
El diagnóstico de la diabetes tipo 2 es cada vez más común en niños y adolescentes estadounidenses,
especialmente en quienes son obesos. Algunos estudios muestran que entre el 8 y
45% de los niños que han sido recientemente diagnosticados con diabetes tienen
el tipo conocido como 2, dependiendo de la situación geográfica y el grupo
racial/étnico.
La
diabetes es una condición crónica que necesita atención cuidadosa, pero con
algo de conocimiento práctico, usted puede hacer que su hijo sea su aliado más
importante para aprender a vivir con la enfermedad.
![]() |
Todo Sobre Diabetes Mellitus |
¿Qué es la diabetes?
La diabetes es una enfermedad que afecta el modo en
que el cuerpo humano usa la glucosa, forma principal de azúcar en la sangre. La
glucosa proviene de los alimentos que consumimos y es la mayor fuente de
energía necesaria para desarrollar las funciones del cuerpo humano.
Después
de que usted consume una comida, su organismo desmenuza los alimentos y los
transforma en glucosa y otros nutrientes que son absorbidos en el flujo
sanguíneo desde el tracto gastrointestinal. El nivel de glucosa en
la sangre sube después de una comida y pone en funcionamiento al páncreas que
genera la hormona insulina y
la libera en el flujo sanguíneo. Pero en las personas con diabetes, el cuerpo
está impedido de producir o reaccionar a la insulina adecuadamente.
La insulina trabaja como una llave que abre las
puertas de las células y permite el ingreso de la glucosa. Sin la insulina, la
glucosa no puede llegar hasta las células (las puertas permanecen
"cerradas" y no hay una llave para abrirlas) de manera que se queda
en el flujo sanguíneo. Como resultado, el nivel de azúcar en la sangre alcanza
niveles más altos que lo normal. Los niveles elevados de azúcar representan un
problema porque pueden provocar varias complicaciones de salud.
¿Qué es la diabetes tipo 2?
Existen
dos principales tipos de diabetes: tipo 1 y tipo 2. Ambos, el tipo 1 y el tipo
2 de diabetes, hacen que los niveles de azúcar sean más elevados de lo normal.
Sin embargo, ambos pueden provocar ese efecto de distintas maneras.
La diabetes tipo 1 (antiguamente denominada diabetes
insulino-dependiente o diabetes juvenil) se manifiesta cuando el propio sistema
de inmunidad de la persona ataca y destruye las células del páncreas que
producen insulina. Los niños con diabetes tipo 1 necesitan insulina para poder
mantener los niveles de azúcar en la sangre dentro de un promedio normal.
Ladiabetes tipo 2 (antiguamente denominada diabetes no dependiente de insulina)
es diferente. En contraste con alguien que tiene diabetes de tipo 1, el cuerpo
de una persona con diabetes tipo 2 aún produce insulina. Pero el organismo no
responde a la insulina normalmente.
La glucosa tiene menos
capacidad para ingresar a las células y cumplir con su misión de suministrar
energía (los médicos denominan esta condición como resistencia a la insulina). Esto causa la
elevación del nivel de azúcar y obliga al páncreas a producir aún más insulina.
Eventualmente, el páncreas puede colapsar por el esfuerzo extraordinario de
producir insulina extra. Entonces, el páncreas posiblemente ya no tendrá la
capacidad para producir suficiente insulina y mantener los niveles de azúcar
dentro de lo normal.
Las
personas con resistencia a la insulina pueden adquirir o no diabetes tipo 2:
todo depende de la capacidad del páncreas de producir suficiente insulina para
mantener los niveles normales de azúcar en la sangre. Generalmente, los niveles
elevados de azúcar en la sangre son una señal de que la persona adquirió
diabetes.
Los niños y los
adolescentes con diabetes 2 recurren a la dieta, el ejercicio y las medicinas
que mejoran la respuesta del cuerpo humano a la insulina para controlar sus
niveles de azúcar en la sangre. A veces los niños y los adolescentes con
diabetes 2 pueden también necesitar administrarse inyecciones de insulina o utilizar una bomba de insulina.
¿Quien adquiere diabetes tipo 2?
Aunque
nadie sabe con certeza cuales son las causas de la diabetes tipo 2,
aparentemente existe un componente genético en su formación. En efecto, se
estima que entre 45 a 80% de los niños con diabetes tipo 2 tienen por lo menos
a un progenitor con diabetes además de una significativa historia familiar
relacionada con esa enfermedad.
En
algunos casos, un progenitor puede ser diagnosticado con diabetes 2 al mismo
tiempo que su hijo o hija.
La mayoría de los niños
y adultos que adquieren diabetes tipo 2 son obesos. El exceso de grasa dificulta más la
respuesta de las células a la insulina. Y el sedentarismo reduce aún más la
capacidad del cuerpo humano para responder a la insulina. En el pasado, los
médicos denominaban a esta enfermedad como diabetes de los adultos porque casi
exclusivamente afecta a personas mayores con sobrepeso. Hoy en día, esa
descripción ya no es acertada. Más niños y adolescentes son diagnosticados condiabetes tipo 2, probablemente porque más niños y adolescentes son obesos.
Algunos
grupos étnicos muestran una mayor tendencia a desarrollar diabetes 2, inclusive
descendientes de indios americanos, afro-americanos, hispano/latinos o
asiáticos e insulares del Pacífico.
Igualmente,
los niños que alcanzaron la pubertad tienen una mayor tendencia a desarrollar
la enfermedad que los impúberes, probablemente debido al crecimiento normal de
los niveles de hormonas que pueden provocar resistencia a la insulina durante
este periodo de rápido crecimiento y desarrollo físico.
¿Cuales son los signos y síntomas de la diabetestipo 2?
Los síntomas de la diabetes tipo 2 no siempre son
evidentes y pueden tardar mucho en desarrollarse. A veces, no se presentan
síntomas. Es importante recordar que no todas las personas con resistencia a la
insulina o diabetes tipo 2 manifiestan estos signos de advertencia, y que no
todos los que tienen estos síntomas necesariamente padecen de diabetes tipo 2.
Pero cuando un niño o un adolescente adquiere
diabetes tipo 2, probablemente:
·
orina con
frecuencia. Los riñones responden a niveles
altos de glucosa en el flujo sanguíneo desechando la glucosa sobrante en la
orina. Un niño con altos niveles de azúcar necesita a orinar con más frecuencia
y en volúmenes mayores;
·
consume
muchos líquidos. Debido a que el niño orina con
tanta frecuencia y pierde demasiados líquidos, sentirá mucha sed. Toma muchos
líquidos en un afán por mantener un nivel normal de agua para el organismo
humano;
·
a menudo se
siente cansado porque el cuerpo no puede
convertir adecuadamente la glucosa en energía.
A veces, los niños y los adolescentes con diabetes
tipo 2, resistencia a la insulina, u obesidad, pueden también presentar areas
de piel engrosada, oscura, como terciopelo alrededor del cuello, las axilas,
dedos del pie o en los codos y las rodillas: una condición cosmética de la piel
denominada acantosis nigricans.
El síndrome de ovario poliquístico (SOP o SOPQ, por
sus siglas en inglés) en niñas es también frecuentemente asociado con la
resistencia a la insulina. El SOP es una anomalía hormonal que puede provocar
el agrandamiento de los ovarios que desarrollan unos sacos rellenos de fluidos
denominados quistes. Las niñas con esa condición a menudo tienen periodos
irregulares o directamente dejan de tener los periodos, y tienen más tendencia
al crecimiento excesivo de pelo en el rostro y en el cuerpo. El SOP también
puede generar problemas de fertilidad.
Los niños y adolescentes con resistencia a la
insulina o diabetes de tipo 2 también muestran una mayor probabilidad de
adquirir hipertensión (presión sanguínea alta) o niveles anormales de grasa en
la sangre (colesterol y triglicéridos). Los médicos caracterizan como síndrome
metabólico la manifestación coincidente de esos problemas en una persona.
La diabetes también puede causar complicaciones a
largo plazo en algunas personas, incluso enfermedades del corazón, apoplejía,
problemas en la visión y afecciones del riñón. La diabetes también puede causar
otros problemas en los vasos sanguíneos, los nervios y las encías. Estos
problemas no se manifiestan generalmente en niños o adolescentes con diabetes
tipo 2 que han tenido la enfermedad solamente por algunos años. Sin embargo,
pueden ocurrir en la edad adulta en algunas personas con diabetes,
especialmente, si esa condición no fue controlada apropiadamente.
Los médicos pueden determinar si una persona tiene
diabetes por medio de una prueba de glucosa en muestras de sangre. Incluso si
un niño o un adolescente no tiene los síntomas de la diabetes tipo 2, los
doctores pueden ordenar exámenes de sangre para verificar su existencia en
niños propensos a tener esa enfermedad, por ejemplo los niños que son obesos.
Si
usted piensa que su hijo tiene síntomas de diabetes, hable con su médico, quien
puede enviar a su hijo a un endocrinólogo
pediatra, médico que se especializa en el diagnóstico y tratamiento
de niños con enfermedades del sistema endocrino, como la diabetes y los
desórdenes de crecimiento.
Vivir con diabetes tipo 2
Un niño o adolescente con diabetes tipo 2
probablemente necesite:
·
alimentarse con una dieta saludable
para conseguir un peso normal y al mismo tiempo obtener los nutrientes
necesarios para crecer y desarrollarse. Los médicos probablemente recomendarán
una dieta con poca sal y grasas, especialmente si el niño muestra alta presión
sanguínea alta o niveles anormales de grasa en la sangre;
·
participar en actividades físicas con
regularidad. El ejercicio ayuda a mejorar la respuesta del cuerpo humano a la
insulina y a quemar más colorías, lo que puede facilitar la eliminación del
exceso de grasa en el cuerpo;
·
conseguir y mantener un peso normal;
·
controlar regularmente los niveles de
azúcar en la sangre;
·
recibir insulina u otros medicamentos
que ayuden al cuerpo a responder a la insulina más efectivamente;
·
trabajar de cerca con sus médicos y su
equipo de control de diabetes para conseguir el mejor control posible de la
enfermedad, y detectar los signos de las complicaciones de la diabetes y otros
problemas de salud que se manifiestan con más frecuencia en niños con diabetes
tipo 2.
Vivir con diabetes es un desafío, no importa cual
sea la edad del niño, pero los niños pequeños y adolescentes, a menudo tienen
asuntos especiales que atender. Los infantes tal vez no entiendan por qué son
necesarias las muestras de sangre y las inyecciones de insulina. Pueden
asustarse, enojarse y negarse a cooperar.
Los adolescentes pueden sentirse diferentes con
respecto a otros adolescentes y tal vez anhelen experimentar un estilo de vida
más espontáneo que el permitido por la diabetes. Incluso cuando siguen a
conciencia el horario de su tratamiento, los adolescentes con diabetes pueden
sentirse frustrados si los cambios corporales durante la pubertad dificultan
aún más el control de la diabetes.
Tener un hijo con diabetes puede ser abrumador a
veces, pero usted no está solo, o sola. Su equipo de vigilancia de la diabetes
no es solo una gran ayuda para atender los asuntos médicos, sino también para
respaldar y ayudar a usted y a su niño a adaptarse a vivir con diabetes.
¿Cuales son los últimos avances
en el tratamiento de la diabetes tipo 2?
Médicos
e investigadores están desarrollando nuevos equipos y tratamientos para ayudar
a los niños a lidiar con los problemas característicos de crecer con diabetes.
Algunos
niños y adolescentes ya están utilizando nuevos aparatos que hacen que las
muestras de glucosa sanguínea y las inyecciones de insulina sean más fáciles y
efectivas.
Uno
de esos aparatos es la bomba de insulina, un artefacto mecánico que puede ser
programado para proveer insulina de una manera parecida a como lo hace el
páncreas.
Los
investigadores también están probando métodos para detener la diabetes antes de
su comienzo. Por ejemplo, los científicos están estudiando si la diabetes puede
ser prevenida en personas que hubieran heredado un alto riesgo de adquirir la
enfermedad.
Mientras
los científicos perfeccionen mejores métodos de tratamiento o incluso de
prevención o cura de la diabetes, los padres pueden contribuir a que sus hijos
vivan vidas más felices y saludables proporcionándoles aliento constante,
preparándolos con información acerca de la diabetes y asegurándose que los
niños se alimenten adecuadamente, hagan ejercicio y mantengan al día su control
de azúcar en la sangre. Haciendo esto permitirá que los niños participen de
todas las actividades del resto de los niños, permitiéndoles crecer y
convertirse en adultos saludables, bien adaptados y productivos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario